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Cómo Romper las Maldiciones y Vivir una Vida Libre



Introducción

"La Biblia nos enseña que como creyentes, tenemos la autoridad y el poder para romper las maldiciones y vivir una vida libre en Cristo. En este artículo, exploraremos cómo podemos identificar y romper las maldiciones que pueden estar afectando nuestra vida."

(Proverbios 26:1-5.)

Maldición es la palabra o expresión que desea el mal para alguna persona u objeto. Se espera que la maldición suelte, una fuerza negativa y maligna que actué en contra de la felicidad y propicie el fracaso del que es rnaldecido. Incluso, los malos efectos pueden pasar a otros (Josué 6:26, 7:24s.).

A veces echar una maldición casi era el oficio de algunas personas (Números 22). Pero Dios puede tornar la maldición  en bendición. Las maldiciones sirven como termómetro moral en el Antiguo Testamento (Deuteronomio 21:23; 27:16-26; 28:16-19).

Para anular las maldiciones la victima podía volver a imprecar a Su enemigo (imprecar = Proferir palabras con que se pida o se manifieste desear que alguien reciba mal o daño.) (Salmo 9:8; Salmo 59:13; Salmo 109:6-20). Para evitar las maldiciones religiosas el único camino era obedecer "Los mandamientos de Jehová (Deuteronomio 11:26).

En el  Nuevo Testamento encontramos rasgos del espíritu antiguotestamentario (Marcos 11:12; Hechos 5:1) pero en general el clima ha cambiado.

La maldición se quita con la bendición (Lucas 6:28; Romanos 12:14). La maldición de la ley ha sido deshecha por el sacrificio de Cristo (Gálatas 3:10-14).La última palabra del Antiguo Testamento es maldición pero el Nuevo Testamento se cierra con una bendición.

01). Maldiciones  heredadas de los antepasados.
      
a).Por pecados cometidos en el seno de la familia.
          1. Idolatría.
          2. Hechicería
          3. Crímenes.
          4. Actos de inmoralidad sexual.
    
(Éxodo 20:5-34;  Números 14:18, 33; Jeremías 32:18; Ezequiel 18:2, 20; Jeremías 31:29; Salmo 106:6; Hebreos 7:9-10; Lamentaciones 5:7-8; Job 21:19; Salmo 12:2-3).

02). Maldiciones que uno mismo se acarrea.

 (Deuteronomio 28:15-20; Deuteronomio 27:15-24).
 (El pecado acarrea maldición)

a).Por relaciones sexuales ilícitas.

1. Adulterio (infidelidad conyugal) Números  5:20-21.
2. incesto (uniones ilícitas entre parientes) (Deuteronomio 27"20-22; 1a.Corintios 5:1-5).
3. Bestialismo (Zoofilia) Deuteronomio 27:21; Lev.18:23. (Zoofilia = Practica de la persona que tiene relaciones sexuales con  algún animal irracional).
4. Homosexualismo (sodomía)  (Levítico 20:13 Habacuc 2:15-16; Génesis 9:20-25; 1ª. Corintios 6:9-11).

 b. Por deshonrar a los padres.

(Deuteronomio 27:16; Éxodo 20:12; Proverbios 20:20; 20:24; Efesios 6:2-3;  Deuteronomio 21:18-21).

    c).Por atacar o difamar a un siervo de Dios.

         (Salmo 109:4-18; Proverbios 30:10; Deuteronomio 27:34; Génesis 12:23;
          27:29;  Números 12:2,20; 1ª. Reyes 13:4-6).

     d).Por una confesión negativa. (Prov. 18:20,21; 6:2)

          1. Me aborrezco por haber hecho eso.
          2. Ojala me muriera.
          3. Voy a parar loco(a).
          4. Todo me sale mal.
          5. Me muero de cansancio (aburrimiento, depresión etc.)

      e).Por introducir objetos malditos en casa. (Deut. 7:26),

       f).Por casarse con un inconverso. (Nehemías 13:23-27; Malaquías 2:11-13;
          2ª. Corintios 6:14-18).

      g).Por no diezmar (Malaquías 3:8-11; Levítico 27:29-32) anatema.

      h).Por hacer indolente o engañosamente la obra de Dios.
          (Jeremías 48:10).

       i).Por confiar en el hombre en vez de confiar en Dios.
          (Jeremías 17:5).

03). Maldiciones proferidas por otras personas.
     
(Santiago 3:6-10; Job 31:30)Los demonios ejecutan las maldiciones.
 Jueces 9:21,23, 56-57).

a).Por figuras de autoridad.
     
1).Padres o esposos 
– ejemplos: Noé Gn.9:25-Jacob  Gn.31:30
Cumplimiento. (Génesis 35:16-19)
Nunca vas a servir para nada.
Siempre serás un fracasado.
Vas a morir en la desgracia.
Vete al diablo o vete al infierno.

2).Hermanos y hermanas Jueces 9:20. 
Cumplimiento Jueces 9:23,52-54,56-57.
Pastores o líderes espirituales jemplos: Josué 6:26(Josué sobre Jericó)
Cumplimiento: 1ª. Reyes 2:23-33; 2ª. Reyes 2:23,24 (Eliseo) hechos 13:6-11    
(El apóstol Pablo sobre Elimas, el encantador.

b), Por siervos de Satanás. (Brujos, hechiceros etc.)
    
1).Sobre individuos. (Ezequiel 13:18-23).
2).Sobre familias. (Nahúm 3:4) (Ha hecho esclavos con sus hechizos las familias).
3).Sobre iglesias. (Génesis 3:1) Gr. Fascino = engaño o hechizo
4).Sobre pueblos y naciones. (Apocalipsis 18:23-Num, 22:8,8:20,23)
          

 No retornar a las maldiciones. (1a. Pedro 2:23; 3:9)
 Dios puede cambiar las maldiciones en Bendiciones.
   
(Deuteronomio 23:4-5; Josué 24:9-10; Nehemías 13:2; 2ª. Samuel 16:12; Salmo 109:28).
Con bendiciones podemos contrarrestar las maldiciones y convertirlas en bendiciones. (Mateo 5:44; 1a. Pedro 3:13).
Cristo llevó la maldición. (Gálatas 3:10,13).
No más maldición. (Apocalipsis 22:3).

Conclusión
"En resumen, romper las maldiciones es un proceso de crecimiento espiritual que requiere fe, oración y la aplicación de los principios bíblicos. Al entender nuestra autoridad en Cristo y aplicar los principios bíblicos, podemos experimentar la libertad y la victoria sobre las maldiciones."

Cómo Superar las Adversidades con la Ayuda de Dios



Introducción

Las adversidades son una parte natural de la vida, pero como cristianos, podemos enfrentarlas con confianza y fe en Dios. En la Biblia, se nos enseña que Dios es nuestra roca y nuestro refugio en tiempos de adversidad. En este artículo, exploraremos cómo podemos salir victoriosos ante las adversidades con la ayuda de Dios.


¿CÓMO SALIR VICTOIOSOS ANTE UNA ADVERSIDAD?

Es normal que muchos vivamos circunstancias adversas en nuestras vidas, situaciones de las cuales no podemos salir victoriosos por nuestra cuenta, sino que necesitamos de la intervención de Dios. Sin embargo, por mucho que oremos, no vemos un milagro en nuestras vidas.

¿Que pasa? ¿Es acaso que Dios no escucha nuestras oraciones? Pues no, el problema no es Dios, ¡somos nosotros!

Hay 4 pasos necesarios que tienen que estar en nuestras vidas para recibir un milagro, y podemos encontrarlos en San Marcos 10:46-52, en la historia de Bartimeo.


San Marcos 10:46-52
46. Entonces vinieron a Jericó; y al salir de Jericó el y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando.
47. y oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús hijo de David, ten misericordia de mí!
48. y muchos le reprendían para que callase, pero el clamaba mucho más: ¡hijo David, ten misericordia de mí!
49. entonces Jesús, deteniéndose, mando llamarle; y llamaron al ciego, diciéndole: Ten confianza; levántate, te llama.
50. El entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús.
51. respondió Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que te haga? Y el ciego le dijo: Maestro que recobre la vista.
52. Y Jesús le dijo: vete, tu fe te ha salvado. Y en seguida recobro la vista y siguió a Jesús en el camino.


1. Reconocer a Jesús
Marcos 10:47a.
El oyó de Jesús, y de inmediato supo quién era. Bartimeo era ciego, pero no necesitaba ver a Jesús para reconocer quién era Él y que podía hacer en su vida. Bartimeo tuvo confianza en Dios.


2. Confiar en Dios:
Marcos 10:47b.
Bartimeo comenzó a gritar y clamar a Dios, para que tuviera compasión de él. Bartimeo sabía que solo Dios podía hacer un milagro en su vida, así que clamó a Él. A Batimeo no le importó que lo callaran.


3. No Callar ante los Demás:
Marcos 10:48.
Muchos nos dirán que no puedemos salir de la pobreza, de la enfermedad, de cualquier situación. Nos dirán que es mejor que nos acostumbremos a vivir la situación, y tratarán de convencernos de que la voluntad de Dios es que estemos así. Pero debemos hacer como Bartimeo, ante esas voces, ¡gritó y clamó más fuerte a Jesús! Y como resultado, Jesús lo escuchó, y acudió a Él, diciéndole "¿Que necesitas?". Bartimeo sabía bien que era lo que necesitaba.

4. Saber que necesitamos:
Marcos 10:51.
Bartimeo era un mendigo, que estaba pidiendo limosnas en la calle. Cualquiera en su lugar, habría respondido a Jesús que necesitaba dinero, casa o comida. Pero Bartimeo sabía lo que realmente necesitaba. Él sabía que todas esas cosas solo eran consecuencias secundarias. Pero había algo que Jesús podía cambiar en su vida, que haría que todo lo demás también cambiara. Por eso, Bartimeo pidió ser sanado de su ceguera. Debemos Clamarle por lo que deseamos, pero pidamos solo aquello que realmente necesitamos ¡debemos identificar nuestra verdadera necesidad!
Cuando recibamos lo que estamos clamando sigamos a Jesús, Bartimeo siguió a Jesús cuando recibió su milagro.


4.1. Seguir a Jesús


Marcos 10:51.
Bartimeo recibió lo que tanto anhelaba “la vista” Bartimeo fue persistente para lograr su meta trazada; pero no se quedó estancado ahí pues siguió a Jesús juntamente con sus discípulos y la multitud que acompañaba a Jesús.
Cuando recibimos algo de parte del señor y se nos es concedido debemos seguir en su camino y no apartarnos del ni por ningún motivo, debemos seguir siendo persistentes al igual que Bartimeo.


Conclusión

Dios está dispuesto a bendecirnos y a hacer un milagro en nuestras vidas, pero tenemos que ser como Bartimeo, Recordemos que Dios dijo en Jeremías 33:33 “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñare cosas grandes y ocultas que tu no conoces” en San Lucas 11:9-10 dijo Jesús “y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallareis; llamad; se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
Bartimeo Clamo, busco y llamo a Jesús, sin importar lo que los demás le dijeran pues el Reconoció de inmediato a Jesús, Confió en Dios, No se dejó vencer ante las críticas de los demás y sabía exactamente lo que deseaba.

En resumen, podemos salir victoriosos ante las adversidades con la ayuda de Dios. Al confiar en Él, perseverar en la fe y buscar Su guía y protección, podemos superar cualquier obstáculo y alcanzar la victoria.

Así nosotros debemos reconocer a Jesús, confiar en él, no callar ante los demás y saber exactamente lo que deseamos. ¡SEAMOS UN BARTIMEO!